La conciencia no siempre te permite ser, lo que expresas. (Abel Desestress)
Intranquilos siguen Chávez y Correa por revelaciones del computador de Raúl Reyes
En menos de dos semanas el presidente Hugo Chávez ha llamado al presidente Álvaro Uribe en tres oportunidades para pedirle que pare la entrega de esa información y de paso insistir en una reunión.
El último llamado lo hizo el pasado miércoles, según reveló el mismo mandatario venezolano a su llegada a Brasil.
“Ayer llamé al presidente Uribe (…) Le he manifestado la preocupación de que sigan saliendo esas cosas y se sigan diciendo que Ecuador apoya la guerrilla, que Venezuela apoya la guerrilla”, dijo. (En realidad su preocupacion es que, se comprueben sus fuertes nexos con las FARC, y EEUU pueda incluir a Venezuela en la lista de países que apoyan al terrorismo.)
Correa no ha llamado a Uribe, pero ha lanzado sus dardos desde Quito. “Cuando el gobierno colombiano nos pase oficialmente las dichosas pruebas se las daremos a la oposición y que hagan lo que se les dé la gana (…) El que nada debe nada teme”.
El martes, en el Palacio de Miraflores, durante un encuentro con reporteros extranjeros, Chávez dijo: “Si las relaciones con Ecuador se vuelven a tensar, se tensarán con nosotros también. Estamos con Ecuador y con el presidente Correa defendiendo la dignidad”.. (habrá querido decir, “Ocultando la dignidad”)
La canciller ecuatoriana, María Isabel Salvador, fue más concreta que Correa a la hora de los reclamos: “Que paren la filtración (no confirmada) de esas famosas computadoras”, dijo luego de sugerir que eso facilitaría el restablecimiento de las relaciones diplomáticas con Colombia.
Aunque Uribe no ha respondido a las súplicas, las filtraciones y declaraciones desde Colombia sobre el tema, se silenciaron. Eso, sin embargo, no garantiza que las computadoras dejen de hablar. Las autoridades estadounidenses tienen pisados sus cables.
El ‘insomnio’ de los vecinos, a causa de los PC de ‘Reyes’, mantiene despierta la crisis política regional que, entre otras cosas, no ha permitido el regreso de los embajadores de Caracas y Quito a Bogotá.
Un solo par de datos conocidos, de los miles que reposan en los computadores, según los cuales Chávez y Correa estarían vinculados en acuerdos secretos con las Farc, tienen a los mandatarios contra la pared.
Estados Unidos quiere llegar hasta el fondo
El embajador de Estados Unidos en Colombia, William Brownfield, advirtió esta semana en Washington que los datos de los PC de ‘Reyes’ “no se pueden meter debajo de un tapete. Tenemos derecho a preguntar, a que exista transparencia. Todos tienen derecho a esas conclusiones. No se puede esconder el contenido de esos computadores. Que salga todo, que se reaccione, y se actué sobre sus conclusiones. Es algo que hay que hacer. No se puede esconder lo que ha pasado… Eso sería un error histórico”.
El juego de frases de Brownfield demuestra el interés de su país en que se conozca el contenido del computador de ‘Reyes’. De hecho admitió que la conocen. En Washington hay funcionarios del gobierno y miembros del Congreso interesados en compartir estas evidencias.
El portavoz del departamento de Estado, Sean McCormak, fue enfático en que se debe verificar, en lo posible, si Venezuela o Ecuador han estado apoyando activamente a las Farc, considerada una organización terrorista internacional en Estados Unidos, para lo cual hay en marcha una “revisión legal preliminar”.
Para E.U. el tema es serio, pues las Farc están en esa lista no por cometer ataques terroristas en Colombia, sino porque los ha ejecutado contra ciudadanos de su país.
Y en esa lista le tienen una larga cuenta de cobro: un grupo de cinco misioneros secuestrados por las Farc en la frontera con Panamá en 1993, tres indigenistas asesinados en 1999, los tres contratistas secuestrados desde el 2003 y hasta el ataque con granadas cerca de un restaurante en la zona rosa de Bogotá donde oficiales suyos departían.
Según E.U. las Farc son el cartel de droga más grande del mundo y les tienen procesos abiertos en cortes del país a los 50 miembros de más alto rango de ese grupo. Por lo tanto, cualquier país o persona que les brinden apoyo, incurren en delito sancionable por sus leyes.
Hasta la OEA en dificultades
Si por cuenta de los computadores de ‘Reyes’ Estados Unidos llegara a aplicar sanciones contra Venezuela o Ecuador, nadie imagina cuál será la suerte de las relaciones con esos países, mientras Chávez y Correa estén en el poder. La situación para Uribe no es nada envidiable.
Un problema con E.U. y por ende para Colombia es que en esos computadores podrían estar, no cientos sino miles de pruebas para construir casos judiciales contra miembros de las Farc y sus aliados.
Por ejemplo: cada persona mencionada por ‘ Reyes’ en referencia al secuestro de los estadounidenses es un blanco potencial para un encausamiento o una orden de extradición. Y lo mismo pasa con tráfico de drogas y otros casos.
La misma OEA, que tiene el mandato de los países miembros para intentar una solución a la crisis regional, tiene dificultades para jugar su papel y devolverle la paz a la región y el sueño perdido a sus mandatarios por culpa de los computadores de ‘Reyes’. Es casi un “imposible” sin la colaboración de los países, dijo esta semana su secretario José Miguel Insulza.
Correa anuncia respuesta ‘contundente’ a Colombia
El presidente ecuatoriano Rafael Correa dijo que dará una respuesta “contundente” a Colombia tras confirmarse la muerte del ecuatoriano Franklin Aizalía en el ataque al campamento de ‘Raúl Reyes’ en su país.
Sin dar detalles de las acciones que seguirá, afirmó en la radio que el lunes empieza la respuesta “ante tanto abuso de Colombia”.
La medida, aseguró, será ”concreta, contundente, pacífica (y) apegada al derecho internacional”. Según el gobernante, ”incluso si el ciudadano (Aizalía) era guerrillero… es un ecuatoriano asesinado en Ecuador por fuerzas extranjeras, (por lo que) ese ciudadano debía ser juzgado por las autoridades ecuatorianas”‘.
Añadió que el caso no va a quedar impune.
Correa investiga la filtración de información sobre Aizalía de los servicios de inteligencia a los medios.
El Tiempo/Colombia
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